Astrología en Clarín

T.E.L: 3 min.

Una nota a página completa en el diario del domingo con una visión pre-Socrática.

Sé que puede resultar redundante, repetitivo, insistente, volver sobre el tema, pero lo considero necesario. Muchos de quienes están en contra de la astrología consideran, sin embargo, que es una forma de pensar antigua que ya no tiene incidencia en la sociedad, que sólo una pequeña minoría se guía por esa seudociencia. Por tal motivo, no sería importante insistir con el tema.
Pero si fuera así, ¿por qué parece lo contrario al examinar los discursos sociales?
En la mayoría de los diarios se publica el horóscopo que es, por supuesto, referencia a la astrología, referencia a la supuesta existencia de 12 clase de personas diferentes entre sí no por el proceso de socialización, no por el desarrollo histórico, sino por la aparente posición en el cielo de algunos objetos.

Pero además se publican artículos con ciertas formas que podrían interpretarse como "científicas" otorgándole un matiz de "seriedad" a una suma de prejuicios discriminatorios. Y se hace en los diarios.

De modo que es necesario mostrar que esto ocurre, aunque algunos no lo quieran ver.

En este caso, el diario Clarín en su edición dominical, publica una nota a página completa en el suplemento Spot, página 14 ^[1]. La nota está firmada por Marta Rodríguez Santamaría y contiene aseveraciones de un par de astrólogos. Junto a la nota hay también un recuadro con "predicciones".

La nota central se basa en la supuesta existencia de ciclos en la vida de las personas ocasionados por el tránsito de Saturno. ¿El planeta o el dios?

Pues la redactora se hace una buena pregunta que NO contesta, veamos:

Los límites y la madure (sic)
Llegado a este punto, vale preguntarse ¿por qué Saturno? ¿Qué propiedades tiene el planeta de los anillos para incidirnos de esa forma? Dice el astrólogo [Alejandro Lodi]: "A Saturno se lo llama el "Señor del Límite" porque representa el principio de realidad. Es el planeta que señala lo que es posible y lo que no: expone nuestras fantasías. Y justamente por eso incentiva nuestras posibilidades reales de concretar cosas, nos invita a poner manos a la obra y nos vuelve responsables de lo que hacemos. De nada vale oponerse. Porque Saturno nos obliga, nos frena sin derecho a la protesta ya sea por un tema de salud, o por la decisión de una persona con autoridad".

La negritas son mías. Seguramente la clase política (por ejemplo en Jujuy) habrá tomado nota de cómo justificar la criminalización de la protesta con un falso argumento astrológico...

Como se ve las "propiedades" de Saturno no son físicas, no se indica que sean magnéticas, eléctricas, gravitatorias, es decir variables estudiadas por los astrofísicos. En cambio son "espirituales". Es como decir que la impresora o el ropero inciden en nuestras vidas "espiritualmente". O bien, no se refiere al planeta Saturno sino al dios Saturno.

En la mitología romana Saturno (asociado el dios griego Cronos, el tiempo) gobernó gracias a un pacto con su hermano Titán por el cual Saturno no tendría hijos. Pero los tuvo y por tal pacto, se los comía. Su esposa, sin embargo, ocultó a tres hijos, entre ellos Júpiter quien luego derrotó a su tío Titán y le devolvió el trono del cielo a Saturno. Luego se enfrentaron padre e hijo y fue Júpiter quien se apoderó del cielo.

Por tanto, la mitología greco-romana se basa en la relación tensa entre padre e hijo y en cómo la madurez de Júpiter estaba fuertemente ligada a su relación con el padre. La mitología la seguimos usando, a sabiendas de que son cuentos, porque nos resulta útil para ilustrar algo de la realidad, en sentido metafórico. Para producir tal sentido no hace falta apelar al planeta. Hacerlo es confundir mitología con ciencia.

Si leemos el artículo se señala justamente eso a partir de considerar que Saturno (el planeta) da una vuelta al Sol cada 29 años influyéndonos "espiritualmente" para traernos madurez. Pero no se refiere al planeta al que los astrólogos no estudian físicamente, sino a que el planeta como objeto es signo, marca, señal, de la influencia del Dios que lleva su nombre. Es religión.

Y es religión pre-socrática. Me remito a la Apología de Sócrates ^[2]:

Sócrates
¡Oh maravilloso Melito!, ¿por qué dices eso? ¡Qué! ¿Yo no creo como los demás hombres que el sol y la luna son dioses?

Melito
No, ¡por Júpiter!, atenienses, no lo cree, porque dice que el sol es una piedra y la luna una tierra.

Ya desde entonces Sócrates desacralizó a los objetos astronómicos. No puede decirse que fuese ateo, pero ciertamente no consideraba a los objetos astronómicos como dioses.

En Clarín, la redactora y los editores, parecen pensar algo anterior, objetivamente superado. Quizás también consideren que la Tierra es plana e inmóvil. Bruno Latour tendría razón en aquello de que nunca fuimos modernos...

Fuentes y enlaces relacionados

^[1] Las tres edades de la vida, según los ciclos de Saturno
Clarín, edición impresa, domingo 6-11-2016, suple Spot, página 14, por Marta Rodríguez Santamaría.

^[2] Apología de Sócrates, en Filosofia.org
http://www.filosofia.org/cla/pla/azc01049.htm

Sobre las imágenes

Imágenes escaneadas del diario.