Científicos Indios contra la astrología

T.E.L: 3 min.

Lograron cancelar un seminario convocado por el Instituto de Ciencias.

El Instituto de Ciencias de la India (Indian Institute of Science,IISc) programó un workshop titulado "Astrology as a Scientific Tool for Individual Progress" ("Astrología como herramienta científica para el progreso individual") para los días 25-26 de noviembre.
Cuando el hecho trascendió por los medios, parte de la comunidad científica protestó y finalmente el seminario se canceló.

Según The Print, como protesta formal, miembros de la asociación de alumnos escribieron una carta al director del Instituto, Anurag Kumar, diciendo: "La astrología es un sistema de creencias que no tiene base científica. Experimentos científicos realizados para probar las predicciones de varios sistemas de astrología han mostrado que es sólo tan buena como el azar".

El Times of India señaló que la organización Breakthrough Science Society (que organizó antes protestas contra las seudociencias y organizó la Marcha de la Ciencia en India), apoyó a los alumnos que enviaron la carta.

De acuerdo a un artículo publicado en Nature.com, el partido político conservador que está en el poder -Bharatiya Janata Party (BJP)- ha mostrado apoyo en darle un lugar a la astrología en las universidades.

La reconocida publicación científica indica en su nota que muchos científicos prefieren no hablar del tema por miedo a perder su trabajo.

Además de la astrología, también la actividades y discursos sobre la "panchgavya" vienen generando debates sobre la seudociencia. Con ese nombre se designa a un preparado o bebida consistente en la mezcla de cinco derivados de la vaca (considerada sagrada): orina, estiércol, leche, yogur y mantequilla.

Los científicos no están en contra de que se realicen investigaciones científicas para saber más sobre esos preparados "milenarios", pero que las investigaciones serias pueden potencialmente refutar esas hipótesis.

El grupo Breakthrough Science Society redactó un memorando este año en relación a la Marcha de la Ciencia. Allí se indica: "Recientemente los intentos de difundir creencias no científicas y supersticiones están en aumento. Muchas veces, ideas no científicas que no poseen evidencias son propagadas como ciencia, apoyadas por personas en altas posiciones."

Mi posición
En mi opinión, como ya sabemos, no se puede obligar a nadie a pensar de alguna manera. O, si se puede, no es deseable. El objetivo es distinguir entre un sistema de creencias como conjuntos de ideas que no se quieren investigar, sino que se aceptan por gusto, y la investigación científica cuyo objetivo es tratar de entender la realidad a través de experimentos y observaciones, es decir, la recolección de datos y su análisis lógico.

Por otro lado, los Estados modernos deberían separarse de las religiones y sistemas de creencias, sin fomentarlas de ningún modo. Paradójicamente (o no tanto), los gobernantes que dicen estar en contra de los fundamentalismos religiosos y teocracias, al asumir su cargo juran poniendo su mano en un libro considerado "sagrado".

Las creencias son ideas y como tales, son inocuas porque las ideas no salen ni entran de nuestras cabezas. No existe la telepatía. Pero las ideas dan origen a los discursos, sean enunciativos (lo que se dice) o fácticos (lo que se hace). Por tanto, frente a los discursos basados en prejuicios es necesario realizar contradiscursos explicativos para que el público general pueda contrastar unos con otros y poder decidir mejor.

En la sociedad moderna globalizada, los discursos circulan, aunque tomen formas algo distintas en cada lugar.
En Argentina, como he dicho aquí muchas veces, la astrología sigue teniendo lugar en los discursos de los medios de comunicación. Y he señalado en distintas oportunidades que se observa un sesgo de género, ya que son discursos dirigidos, sobre todo, a las mujeres.

Las ideas de que estos discursos son inocuos, inofensivos, de mero entretenimiento y minoritarios no están debidamente avaladas por datos objetivos y la única consecuencia de sostenerlas es el silencio, por lo cual son muchos más los discursos en un sentido que en otro.