Las mujeres mienten en sus denuncias de género

T.E.L: 5 min.

La afirmación del título es tan válida y verdadera como la astrología.

Entre los discursos compartidos señalo algunos con los que me encontré estos días:
1 - Página/12, Suple Las 12, nota "Remeras con signo" donde difunde una iniciativa de vender remeras con imágenes de los signos astrológicos, esto, en una publicación "feminista". Contradicción. Enseguida explicaré.

2 - Canal LN+ 14-12. Segmento conducido por Luciana Vázquez. Entrevista a Sabrina Cartabia, abogada de Thelma Fardín. Entre otras cosas, la abogada menciona que cuando ha fallado (en doble sentido, de fallo y de errar) la Justicia en cuestiones de género, una causa fue la no aplicación del método científico. Dice la abogada que las cosas hay que probarlas, sin desconocer las dificultades de hacerlo en casos violencia de género.

3 - Comentarios de oficina, redes sociales: ¿Otra denuncia? Sí, claro...¿Y las tenemos que creer?
La catarata de denuncias de mujeres contra hombres, entonces, aparece cuestionada. ¿Por qué? Dicen que lo hacen "ahora" y no "antes", como si el cuándo importara mucho para determinar si algo es cierto. Esta actitud (que no adoptan sólo hombres) es conspiranoica, ya que supone que las mujeres, en el mundo, se confabularon para mentir, como si ganaran algo con eso.
En cambio, podríamos preguntarnos: ¿Acaso no es verosímil que las mujeres hayan sido violadas, maltratadas, acosadas, prepoteadas por los hombres y que callaran por miedo a perder trabajos o al estigma social? ¿No es verosímil pensar que como esto último está cambiando, entonces, cambia lo primero y por eso hay "ahora" denuncias?
Se pone en duda la legitimidad de las denuncias de las mujeres porque los prejuicios a favor de los hombres y en contra de las mujeres están fuertemente instalados, incluso en mujeres.

El pensamiento lógico es indispensable no sólo en las ciencias, también en la Justicia, pero lo usamos (bien o mal) también en la vida cotidiana. Cuando no lo hacemos, generamos prejuicios. ¿Qué otra cosa es un prejuicio sino una idea lógicamente inválida? Los prejuicios son conclusiones inválidas a las que llegamos a partir de pocos datos. Eso es, también, la astrología.

Pero notemos que las mismas personas, mujeres, que están en contra de los discursos del tercer ejemplo, avalan, como se muestra en el primer ejemplo, la astrología, que no es otra cosa que una fábrica de prejuicios.

Chicas, mujeres de Las 12: ¡Son muy machirulas!
Por favor, no me diga alguien que al tratar a las mujeres de "machirulas" es un "abuso" porque entonces se vacía el concepto. Discutir no es abusar. Discuto con cualquiera. Discuto con mujeres porque las mujeres pueden discutir.

Los prejuicios no son sólo ideas "en contra" de personas, sino también "a favor". Por ejemplo, existe un prejuicio "a favor" de los que escriben con la mano izquierda, que dice que son más "inteligentes". Un prejuicio es una idea científicamente falsa o lógicamente inválida. Así, los dichos de la astrología no son otra cosa que eso. Por tanto, la "astrología feminista" es un doble oxímoron. Al contrario que una ideología de liberación, la astrología es una corriente de ideas determinista. A contramarcha de una ideología materialista, que permitiría cambiar la realidad objetiva a través de hechos producidos materialmente por las personas, es una ideología espiritualista que depende del "influjo cósmico" de los planetas, que en realidad son los dioses romanos, como Júpiter o Marte.

Se critica a veces a la ciencia y a quienes estamos a su favor de ser "positivistas", lo que supone pretender que lo que se dice sea probado con evidencias (eso que dice la abogada de Fardín) y que también supone formas de determinismos. Hay determinismos verdaderos y otros falsos. El movimiento de los planetas, que depende casi exclusivamente de la gravedad a través de las Leyes de Newton y Kepler, permite predecir con mucha precisión las órbitas de los planetas. Es un determinismo verdadero, que se puede probar.
En cambio, la astrología supone un determinismo falso, que nunca se probó y es inverosímil.
Sin embargo, para algunas, las ganas de creer es más fuerte. Claro, también para "algunos" y así explicamos a los unos y las otras.

Las denuncias de violencia de género deben ser probadas, sin dudas. De lo contrario caeríamos en la salvajada de inculpar sin pruebas y encarcelar personas sin juicio jurídico, sino sólo mediático. No podemos volver a ser Torquemadas. Sin embargo, como señala la abogada, para poder probar las cosas, las mujeres deben tener las herramientas necesarias, de lo contrario todo se vuelve en contra. Se han dado algunos pasos favorables en ese sentido, pero falta mucho.

Las denuncias deben ser consideradas seriamente. En cambio, lo que suele ocurrir es que la primera actitud es descreer bajo la suposición de una conspiración mundial de mujeres que buscan vaya-uno-a-saber-qué.

En el mientras tanto podemos hacer uso del beneficio de la duda, de la que sólo se podrá salir si las denuncias se investigan con seriedad, lo que también significa tomar con seriedad la posibilidad de que la denuncia sea verdadera, con todo lo que eso implica.

Lo que no se puede tomar seriamente es la astrología. Sin embargo, sí hay que tomarlo con seriedad en otro sentido: la astrología es una fábrica de prejuicios. Y son prejuicios dirigidos directamente a las mujeres, como ya he probado en este blog más de una vez.

Hace tres días publiqué un escrito de tres carillas en el que explico por qué la astrología no es otra cosa que una usina de prejuicios. Se puede acceder desde el costado del blog.

ASTRONOMÍA Y GÉNERO
Recientemente se conocieron varias denuncias de género contra el astrónomo Neil deGrasse Tyson. La ciencia no está al margen de este tipo de acciones. Las ciencias, incluso las llamadas ciencias duras, se clasifican en virtud de los objetos de estudio, pero en todo los casos son acciones sociales, hechas por personas.
Los casos del #metoo en el mundo del espectáculo en EE.UU. y ahora también en Argentina indican que hay ámbitos en los que estas acciones eran (son) comunes, es decir, frecuentes.
En ámbitos más reducidos, ocurrirá en forma menos frecuente, pero no menos grave.
La astronomía argentina ha sido considerada muy "igualitaria" en comparación con otros países por la cantidad y la calidad de mujeres en esta ciencia. Podemos hacer una larga lista de verdaderas eminencias en astronomía.

Es difícil pensar que en este ámbito de la ciencia local no haya habido, nunca, algún abuso. No se conocen muchas denuncias al respecto.
Denunciar hechos del pasado es importante no para generar tráfico en los medios de comunicación (eso que ahora se llama clickbait), sino porque es una forma de impedir que ocurra en el futuro. Implica tomar acciones concretas para visibilizar un problema y buscar soluciones.

Ser crítico de las ciencias es coherente con el pensamiento científico. Ocultar la basura debajo de la alfombra, no.

Hasta ahora, las denuncias provienen sobre todo de las estrellas del mundo del espectáculo. Cabría preguntarse qué otro espectáculo ocurre con las mujeres que estudian las estrellas.

Adenda (12-1-2019)
Para ser más claro con lo que quise decir:
Las denuncias de las mujeres deben ser consideradas seriamente, aunque sea difícil probar muchos casos de abusos pasados, porque son verosímiles, de manera análoga a los casos de corrupción, que también son difíciles de probar y no por eso se objeta las denuncias (que sean verosímiles).
Sin embargo, no es lo mismo lo verosímil con lo verdadero. Para saber, con un cierto grado de seguridad, que algo es verdadero, debe ser probado con pruebas, evidencias.
Por otro lado, lo verosímil no será igual para todos los casos: muchas figuras "mediáticas" se han caracterizado por inventar escándalos para hacerse conocidas o llevar gente al teatro. Allí demandaremos más que a otras personas. Es como el cuento de Pedro y el lobo. Si Pedro dijo tres veces que venía el lobo y no vino, ante la cuarta vez no le tendremos confianza a Pedro. Pero debemos saber que quizás ahora sí es cierto. Que haya mentido tres veces antes no asegura que siempre en el futuro mienta. Por eso, Pedro tendrá la obligación de demostrar con alguna prueba que lo que dice ahora es cierto para que nos resulte verosímil y podamos volver a confiar. En ningún caso, sin embargo, la confianza será ciega, sino lúcida.
Hay muchísimos casos registrados y comprobados de abusos de hombres a mujeres. También hay casos de abusos de mujeres hacia hombres, en menor medida. No es sólo una cuestión de género, sino de poder. En algunos casos el poder será la fuerza física, pero en otros es el poder político, económico o social. Los abusos de poder son moneda corriente y son la causa tanto de la corrupción como de los abusos de género. Que los hombres han tenido y tienen todavía más poder que las mujeres está más que demostrado. Por eso y por los casos documentados, las denuncias, en general, son verosímiles.
Luego, en cada caso habrá que investigar y tratar de obtener las pruebas necesarias.

En paralelo, los postulados astrológicos son inverosímiles. Es tan ilógico que la posición aparente de planetas, sol y luna afecten la personalidad de los individuos, como que la posición de las montañas afecte la forma de ser de las personas.

Fuentes y enlaces relacionados