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¡Que no cunda el pánico!
"¿No es suficiente ver que un jardín es hermoso sin tener que creer que también hay hadas en el fondo?" - Douglas Adams, La guía del autoestopista galáctico.

5/3/12 - DJ:

Por una mirada más que astronómica

T.E.L: 3 min. 11 seg.

Los chicos del Proyecto Miradas están en la dulce espera, mientras recorren un camino lleno de esperanzas y voluntades Latinoamericanas unidas bajo el mismo cielo.



Acaso hay quienes piensen que el Cielo es aquel lugar intangible al que va el ser humano luego de morir. (Aquellos que supuestamente se portaron "bien")...

Están los que imaginan al Cielo como una bóveda celeste cristalina que reúne objetos físicos de grácil movimiento aparente a distancias siderales.

Pero el Cielo es también aquello que nos une.

Así, mirando alto, pero con una visión más profunda que la mera observación astronómica, peregrinan Yayo y Sofía, los aventureros rosarinos que salieron con su Aguará a recorrer las venas abiertas de América Latina. Van con su didáctica y sus telescopios; con entusiasmo y fuerza de voluntad, a unir y reunir a los chicos de pequeños pueblos para llevarles el conocimiento de aquí abajo y de allá arriba.

La astronomía -como toda ciencia, como toda actividad humana- puede ser muy elitista. Y lo que esta pareja viene haciendo es abriendo caminos, multiplicando accesos de una forma que no puede ser más que emocionante.

A veces, para ser honesto, me da una vergüenza terrible no reconocerme con ese valor. Y aquello de que cada uno tiene su rol en la sociedad... nunca me lo termino de creer.

¿De qué hablo? Hablo del Proyecto Miradas, un viaje que emprendieron dos rosarinos a principios del año pasado para visitar escuelas en diferentes países de Latinoamérica y enseñar astronomía, sin desconocer sus orígenes, sus historias de vida, sus necesidades.

Sofía es profesora y psicóloga social. Y Yayo (Daniel) es periodista. Pero ¡qué tontos somos si suponemos que los estatus, los títulos, nos definen! Sofía y Yayo son mucho más que eso. Son entrega y motivación. Son ejemplo. No ejemplos de bronce o de mármol, sino que -y allí está lo extraordinario- son personas como usted o como yo. Pero que se animaron. Que se dieron cuenta y asumieron el compromiso de dar, más que de recibir, aunque creo que en este periplo americano también recibieron mucho cariño y están aprendiendo aquello que no se puede enseñar o adquirir en un colegio o una facultad.

En el sitio del Proyecto Miradas, la pareja rosarigasina cuenta que están esperando. Esperando que les arreglen su Aguará, ese bellísimo transporte que a veces será una bendición y quizás otras sea una carga. Pero también están en la dulce espera, lo que es más hermoso de saber que la observación de cualquier nebulosa de reflexión.

Cuentan que es posible que gracias al esfuerzo suyo y de otros que también aportan puedan transformar este viaje en un documental. (¡Gente del Canal Encuentro, oigan!). Yo creo que sería formidable.

Me contaron por mail hace algunos días que en ese momento estaban en Cartagena, a punto de cruzar a Panamá.

Y nos dejan un video que comparto con los lectores.


http://youtu.be/xxfWz-qxpjc


Un proyecto astronómicamente emotivo
La astronomía es una puerta magnífica hacia otras puertas. Hacia las ciencias exactas y naturales, aunque también un portón hacia el pensamiento crítico. Es una forma de reunir lo científico con lo cultural con lo educativo con lo lúdico y recreativo.

Pero las estrellas y las historias mitológicas (sobre todo las originarias y no sólo las que heredamos de Grecia y Roma) no sólo pueden "servir" como referencias para guiarnos sin brújula o para poder seguir a un astro durante una noche de observación.
Son también referencias que nos unen en muchos otros sentidos.

Se suele decir que la ciencia no es democrática. Se lo dice en un sentido: no importa que haya consensos amplios para determinar si un objeto es así o funciona asá. Hay que tener evidencias, realizar experimentos. No basta con que la mayoría se ponga de acuerdo en algo, hay que justificarlo debidamente.

Desde otro punto de vista, la ciencia puede no ser democrática por otros motivos, por ejemplo por su cerrazón, su lenguaje ajeno al cotidiano (también ocurre con las artes y otras actividades), por su "lejanía" del ciudadano común desde lo técnico, educativo. Y por lo económico.

Abrir puertas y caminos es una tarea difícil. Requiere compromiso y voluntad. Necesita de convencimiento (no ceguera). Y eso, supongo, sólo se logra, haciéndolo.

¿Significa acaso que entonces debemos hacer lo mismo, seguir el ejemplo? Cada uno sabrá por dónde va su camino. Pero ahí hay algo que no puede objetarse más que con excusas.

Los invito a conocer el Proyecto Miradas desde su sitio web. Quizás a colaborar si pueden hacerlo de alguna manera. Pero por sobre todo, son Sofía y Yayo los que nos invitan a todos. A mirarnos a nosotros mismos y a levantar la mirada, antes que a la esfera celeste, a los ojos del prójimo.


Fuentes y links relacionados

Sobre las imágenes
  • Imagen inicial: foto de Proyecto Miradas, álbum de FB 52. Tola Chica, Tumbaco, Ecuador.
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