T.E.L: 4 min.
De ser una de las ciencias más antiguas a la ERA DORADA actual.
Hace unos años, la IAU (Unión Internacional de Astronomía) publicó un libro sobre las "Grandes Ideas en Astronomía". Una de esas ideas es que esta ciencia es una de las más antiguas.
He detectado que algunas personas malinterpretan qué significa esa frase. Que nuestros antepasados hayan podido observar el cielo nocturno a simple vista no es suficiente para llamar a eso "astronomía". En todo caso, sí se podría considerar como astronomía lúdica. Pero para una definición mínima de ciencia, además de la percepción sensorial, hace falta el registro. Los datos son una materia prima para la investigación científica.
Así, para una astronomía científica mínima, hace falta tener escritura y matemáticas para indicar tiempos y distancias o ángulos. El hecho de que las prácticas antiguas incluyeran astrología y religión, no impide pensar que una parte de la tarea era científica, al menos en el registro sistemático de objetos celestes.
Uno de tales registros de estrellas más antiguos es el Three Stars Each de los Babilonios, que dividían el cielo en tres partes, y el MUL.APIN, que data del 1000 Antes de la Era Común (AEC).
En el siglo 2 AEC, Hiparco realizó un catálogo de 850 estrellas que habría sido la base para el posterior Almagesto, con 1000 estrellas, de Ptolomeo.
Sin embargo, esta "gran idea" de que la astronomía es una de las ciencias más antiguas, creo que debería complementarse con otra: las tres eras.
LAS TRES ERAS DE LA ASTRONOMÍA Y SUS REVOLUCIONES
Desde los primeros registros hasta el Siglo XVII podemos pensar la astronomía antigua. Desde allí al siglo XX, la astronomía moderna. A partir del Siglo XX hasta el presente, la astronomía contemporánea.
La primera era abarca miles de años. ¿Qué se podía conocer y qué no durante ese período?
Los antiguos solo podían detectar objetos visibles a simple vista:
En el Sistema Solar, los planetas hasta Saturno, el Sol y la Luna. Algunos cometas.
Más allá: las Nubes de Magallanes y algunas supernovas visibles a simple vista.
Estrellas: una gran cantidad se podían ver, pero que eran solo una pequeña fracción de la Vía Láctea.
No podían observar:
-El resto de las lunas del sistema solar: Las 4 más grandes de Júpiter fueron descubiertas por Galileo en el S. XVII. En total, Júpiter y Saturno poseen más de 120 lunas.
-Urano se descubrió en el S.XVIII, Neptuno en el siglo siguiente y Plutón en 1930.
-Las "nebulosas espirales", luego comprendidas como galaxias.
-Cúmulos globulares, púlsares, enanas blancas, enanas marrones, agujeros negros.
-FRB, GRB, rayos cósmicos, ondas gravitacionales, CMB, medio interestelar.
Si pudiéramos poner todo el conocimiento actual, todos los objetos astronómicos conocidos, en un único catálogo (Un Catálogo para Gobernarlos a Todos), entonces el 90% o más de las entradas habrían sido hechas desde el Siglo XX.
LAS REVOLUCIONES
A partir de Copérnico y de la mano de Galileo, Kepler y Newton, en el Siglo XVII se inició un cambio de paradigma para pasar del Geocentrismo al Heliocentrismo.
Además, a partir del uso de telescopios, se pudieron observar estrellas más débiles, más lejanas (de mayor magnitud) y descubrir objetos del espacio profundo.
A finales del Siglo XIX, principios del XX, surge la fotografía analógica, la espectrografía, se desarrolla la teoría nuclear. Unas décadas después, la fotografía digital, la computación. Las misiones y telescopios espaciales. Los catálogos se multiplicaron exponencialmente. El número de descubrimientos aumentó con frecuencia desenfrenada.
Pero no es solo mayor cantidad. También desde el Siglo XX hubo un cambio de paradigma, una revolución: del Universo Estático al Universo en Expansión. Y todavía estamos "montando la ola" de otra revolución: de la materia normal a la materia oscura, que es todavía capítulo abierto.
De las Tres Eras, nosotros vivimos en la ERA DORADA de la astronomía. Tenemos el privilegio de vivir en la época de mayor cantidad de descubrimientos. En la era de la cosmología científica.
GRAN FINALE
Creí apropiado el tema para finalizar el año, teniendo en cuenta que los datos recopilados con el Telescopio James Webb fueron noticia este 2022.
El gran avance de la astronomía no se debió a que seamos más inteligentes o curiosos que los antiguos: la diferencia son los instrumentos. No alcanza con el deseo, hacen falta fierros. Y desarrollo teórico.
La Agencia Espacial Europea (ESA) lanzó la misión Gaia, en curso, que es usada por los astrónomos para medir posiciones y hacer un nuevo catálogo estelar. En su sitio web, la ESA dice: "El catálogo Gaia final contendrá datos astrométricos completos (posición, distancia, movimiento) y fotométrico (brillo y color) de más de mil millones de estrellas, así como información adicional incluyendo la clasificación de las fuentes y listas de estrellas variables, sistemas múltiples y astros que poseen exoplanetas. Para más de 150 millones de estrellas habrá mediciones de velocidad radial -la velocidad a la que las estrellas se alejan o acercan a nosotros".
Además de los telescopios, otros dispositivos permiten a los astrónomos adquirir datos analógicos del cosmos y registrarlos en forma digital (los prismas, cámaras y computadoras). Su análisis es todo un desafío en virtud del diluvio de datos. Cada vez más los profesionales usan redes neuronales para procesar la información y las simulaciones computacionales ya son moneda corriente.
En definitiva, la astronomía contemporánea no tiene casi nada que ver con la antigua. Así como es necesario valorar nuestra herencia cultural producida por diferentes culturas a lo largo de la historia, también hace falta entender el avance extraordinario del presente.
Los paradigmas en el pasado duraban milenios. Hoy, el Modelo cosmológico estándar -de menos de un siglo, excepto por los aportes de Newton- ya son cuestionados. Esta ansiedad moderna es producto de la aceleración de los descubrimientos por el incremento de datos.
Si en nuestra galaxia hay entre 10^11 y 10^12 estrellas y existe una cantidad similar de galaxias, entonces habrá entre 10^22 y 10^24 astros en el cosmos. ¡Queda casi todo por descubrir!
En el Universo, el 31 de diciembre no es una fecha especial. No empieza ni termina nada. Pero para nosotros, por nuestro calendario, marca el final de una revolución y el inicio de otra. La revolución de la Tierra alrededor del Sol.
En forma virtual, entonces, levanto mi copa para desear una "revolutio", una vuelta más para todos, un buen año 2023. ¡Saludos!☉
Minardi, S., Harris, R.J. & Labadie, L. Astrophotonics: astronomy and modern optics. Astron Astrophys Rev 29, 6 (2021). https://doi.org/10.1007/s00159-021-00134-7
A HISTORY OF ASTROMETRY - PART I
Big Ideas in Astronomy: Astronomy Literacy Booklet Released by IAU Commission C1
By Anagoria - Own work, CC BY 3.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=23144261
Gaia vs Hipparcos
http://rcsstewa.com/wp-content/documents/workshop/day2/2m.pdf
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