Se trata de los científicos Manuela Campanelli, Carlos Lousto y Yosef Zlochower, del Centro de Relatividad Computacional del Instituto de Tecnología de Rochester (RIT), quienes , como contábamos aquí, ya habían realizado simulaciones de choques entre dos agujeros negros.
La nueva simulación de múltiples agujeros negros evolucionando, orbitando y finalmente colisionando confirmó la robustez de su código. La edición de mayo de Physical Review D publicará los últimos hallazgos del equipo en un artículo con el título "Close Encounters of Three Black Holes".
"Descubrimos complicadas órbitas dinámicas, fusiones triples simultáneas y complejas ondas gravitacionales que podrían ser observadas por los detectores como LIGO y LISA", explicó Lousto. "Estas simulaciones son oportunas porque un triple cuásar fue recientemente descubierto por un equipo liderado por el astrónomo de Caltech George Djorgovski. Esto presumiblemente representa el primer agujero negro supermasivo triple".
El equipo simuló el caso más simple con igualdad de masas y sin rotación, un prerequisito para simulaciones más complejas. El conjunto de supercomputadoras del centro "newHorizons" procesó las simulaciones y realizó evoluciones de hasta 22 agujeros negros para verificar los resultados.
"Veintidos non va a ocurrir en la realidad, pero tres o cuatro pueden ocurrir", acota Zlochower. "Nos dimos cuenta de que el código mismo no se preocupa de cuántos agujeros negros haya. Mientras podamos especificar dónde estaban localizados -y haya suficiente poder computacional- podemos rastrearlos".
Para los científicos como Campanelli, que se especializan en astrofísica computacional y relatividad numérica, son esenciales herramientas como estas computadoras de alta performance. Oportunamente, habíamos hablado aquí de SUGAR, una supercomputadora para escuchar agujeros negros.
Los científicos esperan medir ondas gravitacionales por primera vez en la próxima década usando el detector conocido como LIGO (Laser Interferometer Gravitational Wave Observatory) y la futura misión espacial de la NASA y ESA denominada LISA (Laser Interferometer Space Antenna).
"Para poder confirmar la detección de ondas gravitacionales, los científicos necesitan modelos. Necesitan saber qué buscar en los datos que adquieren, de otra forma verían sólo ruido. Si sabes qué buscar puedes confirmar la existencia de ondas gravitacionales. Es por eso que necesitan todas estas predicciones teóricas", explica Campanelli.
"Las ondas gravitacionales pueden confirmar la existencia de agujeros negros directamente porque tienen una firma especial. Eso es lo que estamos simulando. Estamos prediciendo una firma muy específica para los encuentros de agujeros negros."
Fuentes y links relacionados
EurekAlert:RIT team simulates first merger of 3 black holes on a supercomputer
Sobre las imágenes
Crédito de las imágenes:CCRG
Lea las Últimas noticias del cosmos más cómodamente en su lector de feed. Suscríbase ¿Qué es RSS, lector de feed? |
Astronomía Agujeros Negros Ciencia
No hay comentarios.:
Publicar un comentario